Blog para jovenes de 10 a 100 años, con hambre de alimento eterno (Mateo 4:4)

jueves, 24 de julio de 2014

¡ TEN PACIENCIA Y FE !

“¿Por qué Dios tarda tanto en responder?”, es la pregunta que nos hacemos cuando nos encontramos en una situación en la que necesitamos una rápida respuesta de Dios. Y es que a veces quisiéramos recibir todo en el mismo momento que lo pedimos, a veces pareciera que quisiéramos que Dios trabajará solo para nosotros para respondernos lo que queremos y en el momento que “lo necesitamos”.






Una de las características que Dios quiere que tengamos es la paciencia, y es que es la paciencia la que nos ayuda a mantener la fe en que Dios ha de responder.

Cuando hablamos de paciencia, hablamos también de saber esperar, no precipitarse ni desesperarse, sino que mantener la calma aunque el panorama pinte mal y aunque las olas se levanten alto y azoten con fuerza nuestra barca. Cuando tenemos paciencia, siempre recibiremos una respuesta, esa respuesta que no será quizá en el momento que nosotros planeamos, pero sí en el momento que Dios planeó.

Dios maneja los tiempos y sus tiempos siempre son perfectos, él no se precipita basado en una circunstancia, ni mucho menos tiene prisa para actuar, él siempre se mueve en medio de la paciencia y según la fe de los que en él confían.

Cuando una persona tiene paciencia y fe tiene que estar seguro que recibirá una respuesta, eso sí, debemos también saber aceptar la respuesta que Dios nos regale puesto que el hecho de tener paciencia y fe no significa que siempre la respuesta será tal y como nosotros quisiéramos, a veces las respuesta de Dios requerirán de mucha madurez de nuestra parte para aceptarlas.





Quizá hoy te encuentres en un momento en donde te preguntas del porque Dios no te responde aún, yo te invitaría a seguir teniendo paciencia y fe, a no precipitarte, a no pronunciar palabras que denoten enojo o reclamo para Dios, nuestra tarea es seguir creyendo, la de Dios es actuar en el tiempo que él considere adecuado y nuestra actitud ante la respuesta de él tiene que ser respetuosa y llena de sometimiento porque entonces estaremos actuando de una manera agradable delante de Dios.


Que la desesperación provocada por la falta de respuesta no te lleve a tomar decisiones que a la largar te traerán consecuencias negativas, en su lugar sigue esperando, no permitas que las malas decisiones tomen el control de ese asunto, al contrario, sigue confiando en Dios y dependiendo de Él porque cuando haces eso tienes que estar seguro que sea cual fuere la respuesta será lo mejor para tu vida.


“Con paciencia esperé que el Señor me ayudara, y él se fijo en mí y oyó mi clamor.”
Salmos 40:1 

“Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.”
Salmos 27:14 



Autor: Enrique Monterroza


martes, 1 de julio de 2014

QUE LA ESPERA NO AGOTE TU FE


En ocasiones podemos llegar al punto en donde la espera para ver concretada aquella promesa que recibimos de parte de Dios se hace muy larga.

Todos aquellos que hemos recibido alguna promesa de parte de Dios podemos decir que el esperar a que se concrete no es fácil, más aun cuando vemos que el tiempo pasa y aquella respuesta que esperamos no llega y lejos de verse venir la vemos cada día mas lejos de cumplir.

Y es que la desesperación por ver concretada dicha promesa puede llevarnos a desesperarnos, a cansarnos o a simplemente renunciar a esa espera y olvidarnos de lo prometido.

Nuestra actitud frente a la espera muchas veces no es la correcta. Y es que la mayoría de nosotros quisiéramos ver respuestas instantáneas, rápidas, pero la realidad es que Dios trabaja en un tiempo perfecto suyo y no mío.

Cuando Dios te hace una promesa, Él la cumplirá, lo único que necesita de nosotros es que sigamos creyendo, pero el cansancio por la espera nos puede llevar a desistir o renunciar a recibir aquello que tanto anhelábamos.

La Biblia dice sobre Dios: “Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?” Números 23:19 (Reina-Valera 1960). En pocas palabras Dios cumple lo que promete.

Este mismo versículo en otra versión de la Biblia dice: “»¡Dios no es como nosotros! No dice mentira alguna ni cambia de parecer. Dios cumple lo que promete.” Números 23:19 (Traducción en lenguaje actual).

No dejes que el cansancio de la espera agote tu fe, no permitas que el tiempo que pase te haga creer que Dios ya no cumplirá lo prometido. Al contrario, sigue creyendo, aférrate a su Palabra y a la promesa de que él cumple lo que promete.

No importa cuanto tiempo pase, porque lo que si tienes que estar seguro es que Dios cumplirá en un tiempo el cual es perfecto como Él mismo.

Dios tiene los tiempos medidos, a Él no se le escapa detalle alguno y aunque muchas veces pensemos que se ha olvidado o a cambiado de parecer sobre una promesa en concreto, debes recapacitar y recordar que su memoria es perfecta y sus promesas se cumplirán tal y como las declaro.

¡Que la espera no agote tu fe! ¡Fortalece tu fe en su presencia! ¡Ve y búscalo!




Autor: Enrique Monterroza